Noticias Rugby · 22 de marzo de 2022

Ayer fue un día distinto....

Como gran parte de los sábado de toda mi vida, y estando ya fijada la primer fecha del campeonato de Rugby de la Unión de Rugby de Rosario, ya el viernes a la noche comencé a sentir esa ansiedad propia de los nuevos desafíos del Tricolor, el inició del campeonato contra CRAI en Santa Fe.

Pero este sábado no fue un sábado como todos los demás, más allá del orgullo que siento de que mis hijos continúen este hermosa tradición, el amor por esta camiseta y este deporte, y el poder verlos jugar con nuestro escudo en el pecho, quiero destacar un hecho particular que hace a toda la comunidad de OLD RESIAN CLUB, que fue la vuelta a la primera del querido ADRIAN ACUÑA BACCHELLA. Una vuelta no esperada, pero si muy deseada y diría casi soñada, por todos quienes lo queremos.

Basta solo recordar aquel triste 20 de Julio de 2018, fecha en la que sufrió un grave accidente de tránsito, que lo margino de las canchas de rugby y de muchas otras actividades diarias que tenía.

Y fue con una sentencia, que para cualquier persona común era inapelable: “Nunca más vas a poder jugar”, así se lo hicieron saber los doctores que lo atendieron. Pero el “nunca más” no es para guerreros, no es para valientes, no era para Bache.

Vinieron años difíciles, operaciones, meses en cama sin poder caminar, rehabilitaciones eternas con el objetivo de volver a caminar, pero BACHE nunca bajo los brazos, en una muestra de resiliencia sin igual. Prueba de ello es que fue superando todos los obstáculos que le impusieron las secuelas del accidente. A su tiempo, con tenacidad y con paciencia volvió a caminar, fue colaborador de una división, luego fue entrenador, termino su carrera universitaria, comenzó a trabajar en un proyecto deseado, comenzó a entrenar nuevamente, y ayer luego de tres años y nueve meses volvió a JUGAR EN LA PRIMERA DEL CLUB. Si en la PRIMERA!!

En nuestra vida cotidiana muchas veces queremos encontrar soluciones rápidas, triunfos apresurados, sin entender que el éxito es simplemente el resultado de nuestro crecimiento interno y que éste requiere tiempo. Seguramente la impaciencia en muchos que aspiran resultados a corto plazo, en un arma de doble filo, pues abandonan súbitamente la tarea emprendida, justo cuando ya estaban a punto de conquistar la meta, sin pensar que el momento oportuno está por llegar, de un momento a otro. El BACHE es una muestra de ello, la vida lo tackleo fuerte, pero el se levanto y siguió andando.

Quiero agradecerte BACHE por esta hermosa enseñanza que gravaste a fuego entre los que te conocemos, y que quiero sea conocida por todos los jugadores de nuestro club, ya que es una muestra viva de que NUNCA HAY QUE BAJAR LOS BRAZOS ANTE LA ADVERSIDAD.

Yo estoy convencido que las cosas mas importantes de la vida no son cosas, son momentos, emociones, recuerdos, lecciones … y ayer dejaste una escrita en la puerta del club, solo hay que saber leerla.

Germán Perro Candini

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